El abuelo de Aahil estaba orgulloso por haber puesto de su parte para mantener el linaje puro de los Meher, pero nadie pudo haber estado mas infeliz que el pequeño Aahil. No se consideró el robo de su inocencia y la incompatibilidad de la diferencia de edad. Por otra parte, nadie la tiene mas difícil que las mujeres de esta comunidad. Cuando no hay hombres disponibles para el matrimonio, los padres de las mujeres las casan con quien se pueda, aunque sea un niño al que le tripliquen la edad.
La práctica del matrimonio infantil en Rajasthan, concentrado mayormente en las regiones de Jaisalmer y Barmer, tiene una larga historia que difícilmente se puede comprender. Mucho antes que sucediera la partición de Pakistán con India, el consejo de los pueblos de la comunidad musulmana Meher, se reunió para decidir el futuro de las tradiciones que por generaciones los mayores herméticamente han protegido sobre todas las leyes.
Como el matrimonio es un patrimonio comunitario, el principal objetivo fue el de mantener la casta Meher aislada y primeramente pura, sin arriesgarse a las mezclas matrimoniales con otras comunidades. La pureza de la sangre tenía un gran peso. Por aquellos tiempos, celosamente se le prohibió a las mujeres Meher casarse con hombres fuera de su comunidad. Por otra parte, a los hombres se les dejó abierta la opción de casarse con una mujer Meher o con una de otro pueblo.
Después de la división de India/Pakistán en 1947, cientos de gentes de los pueblos Meher huyeron para Pakistán. Años después, familias enteras se cruzaban la nueva formada frontera para concertar matrimonios, pero con el tiempo, la nueva constitución de la India intervino en el cruce clandestino, cerrando sus puertas indefinidamente.
Fue entonces cuando familias de ambos lados de la frontera perdieron sus conexiones por completo con sus parientes. Consecuentemente, como los hombres tenían la opción de casarse fuera de su casta, tenían la posibilidad de encontrar esposas en otros pueblos. Pero con los años esto resultó en un gran dilema: El pueblo de los Meher se quedó despojado de hombres dejando a las mujeres en edad casadera sin hombres disponibles para el matrimonio. La regla impuesta sobre las mujeres seguía en pie y se obligaba firmemente pero cada día había menos y menos hombres. A las mujeres no les quedaba otra opción mas que quedarse solteras por el resto de sus vidas o casarse con un hombre mayor o viudo de los pocos que había.
Una vez mas, el consejo del pueblo Meher se reunió para darle solución al problema matrimonial, ya que en vez de conservar la casta pura, el clan se estaba desapareciendo. En lugar de darle fin a la ley aplicable únicamente a las mujeres, optaron por una solución poco convencional: Por tal de mantener a las mujeres en el clan, se aplicó una ley que afectaba a los hombres pero que contaban con edad suficiente para procrear. En otras palabras, a las mujeres solteras y ya mayores las obligaron a casarse con hombres adolescentes o niños.
Tristemente, todos las tienen de perder. Por una parte, se quebranta una ley de la Constitución de la India llamada: ‘Prohibition of Child Marriage Act’, que tiene como función de proteger a los niños del matrimonio infantil y la violación de sus derechos civiles. Pero en el aislado y caluroso desierto de las comunidades de Rajasthan, la policía federal de la India no tiene los medios para controlar dichas comunidades e imponer la ley legislativa. Por otra parte, en estas sociedades con la tradición de la endogamia fuertemente instalada por medio de las castas, difícilmente se protege a la mujer dejando el terreno abierto para el abuso y explotación de ambos.
La práctica del matrimonio infantil en Rajasthan, concentrado mayormente en las regiones de Jaisalmer y Barmer, tiene una larga historia que difícilmente se puede comprender. Mucho antes que sucediera la partición de Pakistán con India, el consejo de los pueblos de la comunidad musulmana Meher, se reunió para decidir el futuro de las tradiciones que por generaciones los mayores herméticamente han protegido sobre todas las leyes.
Como el matrimonio es un patrimonio comunitario, el principal objetivo fue el de mantener la casta Meher aislada y primeramente pura, sin arriesgarse a las mezclas matrimoniales con otras comunidades. La pureza de la sangre tenía un gran peso. Por aquellos tiempos, celosamente se le prohibió a las mujeres Meher casarse con hombres fuera de su comunidad. Por otra parte, a los hombres se les dejó abierta la opción de casarse con una mujer Meher o con una de otro pueblo.
Después de la división de India/Pakistán en 1947, cientos de gentes de los pueblos Meher huyeron para Pakistán. Años después, familias enteras se cruzaban la nueva formada frontera para concertar matrimonios, pero con el tiempo, la nueva constitución de la India intervino en el cruce clandestino, cerrando sus puertas indefinidamente.
Fue entonces cuando familias de ambos lados de la frontera perdieron sus conexiones por completo con sus parientes. Consecuentemente, como los hombres tenían la opción de casarse fuera de su casta, tenían la posibilidad de encontrar esposas en otros pueblos. Pero con los años esto resultó en un gran dilema: El pueblo de los Meher se quedó despojado de hombres dejando a las mujeres en edad casadera sin hombres disponibles para el matrimonio. La regla impuesta sobre las mujeres seguía en pie y se obligaba firmemente pero cada día había menos y menos hombres. A las mujeres no les quedaba otra opción mas que quedarse solteras por el resto de sus vidas o casarse con un hombre mayor o viudo de los pocos que había.
Una vez mas, el consejo del pueblo Meher se reunió para darle solución al problema matrimonial, ya que en vez de conservar la casta pura, el clan se estaba desapareciendo. En lugar de darle fin a la ley aplicable únicamente a las mujeres, optaron por una solución poco convencional: Por tal de mantener a las mujeres en el clan, se aplicó una ley que afectaba a los hombres pero que contaban con edad suficiente para procrear. En otras palabras, a las mujeres solteras y ya mayores las obligaron a casarse con hombres adolescentes o niños.
Tristemente, todos las tienen de perder. Por una parte, se quebranta una ley de la Constitución de la India llamada: ‘Prohibition of Child Marriage Act’, que tiene como función de proteger a los niños del matrimonio infantil y la violación de sus derechos civiles. Pero en el aislado y caluroso desierto de las comunidades de Rajasthan, la policía federal de la India no tiene los medios para controlar dichas comunidades e imponer la ley legislativa. Por otra parte, en estas sociedades con la tradición de la endogamia fuertemente instalada por medio de las castas, difícilmente se protege a la mujer dejando el terreno abierto para el abuso y explotación de ambos.