Dulce Navidad para los Mavs que vencen a Lakers e inauguran estatua de Nowitzki

DALLAS -- Luka Doncic tuvo regalos tanto para sus fanáticos como para sus compañeros de equipo en el Día de Navidad.

El canastero anotó 32 puntos en su primer duelo de Navidad en casa en el importante día festivo y de tradición basquetbolera, mientras que en los vestidores le dejó un patín nuevo a cada uno de sus coequiperos. Fue una celebración redonda para los seguidores de los Mavericks, pues antes del estelar juego atestiguaron la inaguración de la estatua dedicada a Dirk Nowitzki afuera de la arena.

El alemán y su familia estuvieron presentes en la ceremonia del destape de la peculiar figura que muestra a Nowitzki haciendo su clásico tiro de "fade away" frente a la entrada principal del American Airlines Center. El exjugador y campeón de los Mavericks agradeció el honor y recordó las palabras que están inscritas al pie de su estatua: "La lealtad nunca se desvanece".

EL JUEGO. Los Lakers, a pesar de los 38 puntos de LeBron James, no pudieron sostener el buen arranque del equipo, que a medio tiempo estaba al frente en el marcador por 11. A diferencia de Dallas, que vio sólidas actuaciones de jugadores como Christian Wood (30 puntos, 8 rebotes, 7 asistencias, 4 robos y 2 bloqueos) y Tim Hardaway Jr. (26 puntos y 6 rebotes); sin Anthony Davis, Los Angeles no tuvo a otro jugador que acompañara en la ofensiva a su líder anotador, que antes del encuentro estaba en duda por una molestia en el tobillo.

La "magia" de Doncic fue contenida hasta cierto punto en el primer periodo, pero a partir del segundo el esloveno empezó a jugar con más libertad y repartió nueve asistencias, con nueve rebotes y dos robos en el triunfo contundente de 124-115. En el tercer periodo los Mavs arrollaron a Lakers 51-21 y ya no dejaron de festejar. Nowitzki había anotado 31 puntos en una Navidad para Mavericks en el 2003, en Sacramento, y era la mayor cantidad hasta antes del domingo.

A Luka se le preguntó al final del partido si se ve jugando por 20 años o más en la NBA como lo hizo el ahora legendario Nowitzki y su respuesta fue casi definitiva.

"No lo sé si por 20 años, preferiría estar en mi rancho en Eslovenia", respondió sonriendo. Fue un día de coincidencias, pues hablando del campo, Doncic llegó vestido de vaquero para pagar una especie de apuesta y entre bromas dijo "soy texano" durante la rueda de prensa al final del partido.

Los Mavs sumaron tres triunfos seguidos para una marca de 18-16, mientras que Lakers se quedó con 13 y 20 reveses, sumando el cuarto desatino en fila.

Doncic el lunes fue nombrado el Jugador de la Semana de la conferencia del Oeste después de liderar a Dallas, 3-1, en ese lapso, con una salida monumental ante Houston el 23 de diciembre, en la que anotó 50 puntos contra los Rockets antes del regreso a casa para el gran día de Navidad que le tenía reservado a los fanáticos del área de Dallas y Fort Worth.

El canastero anotó 32 puntos en su primer duelo de Navidad en casa en el importante día festivo y de tradición basquetbolera, mientras que en los vestidores le dejó un patín nuevo a cada uno de sus coequiperos. Fue una celebración redonda para los seguidores de los Mavericks, pues antes del estelar juego atestiguaron la inaguración de la estatua dedicada a Dirk Nowitzki afuera de la arena.

El alemán y su familia estuvieron presentes en la ceremonia del destape de la peculiar figura que muestra a Nowitzki haciendo su clásico tiro de "fade away" frente a la entrada principal del American Airlines Center. El exjugador y campeón de los Mavericks agradeció el honor y recordó las palabras que están inscritas al pie de su estatua: "La lealtad nunca se desvanece".

EL JUEGO. Los Lakers, a pesar de los 38 puntos de LeBron James, no pudieron sostener el buen arranque del equipo, que a medio tiempo estaba al frente en el marcador por 11. A diferencia de Dallas, que vio sólidas actuaciones de jugadores como Christian Wood (30 puntos, 8 rebotes, 7 asistencias, 4 robos y 2 bloqueos) y Tim Hardaway Jr. (26 puntos y 6 rebotes); sin Anthony Davis, Los Angeles no tuvo a otro jugador que acompañara en la ofensiva a su líder anotador, que antes del encuentro estaba en duda por una molestia en el tobillo.

La "magia" de Doncic fue contenida hasta cierto punto en el primer periodo, pero a partir del segundo el esloveno empezó a jugar con más libertad y repartió nueve asistencias, con nueve rebotes y dos robos en el triunfo contundente de 124-115. En el tercer periodo los Mavs arrollaron a Lakers 51-21 y ya no dejaron de festejar. Nowitzki había anotado 31 puntos en una Navidad para Mavericks en el 2003, en Sacramento, y era la mayor cantidad hasta antes del domingo.

A Luka se le preguntó al final del partido si se ve jugando por 20 años o más en la NBA como lo hizo el ahora legendario Nowitzki y su respuesta fue casi definitiva.

"No lo sé si por 20 años, preferiría estar en mi rancho en Eslovenia", respondió sonriendo. Fue un día de coincidencias, pues hablando del campo, Doncic llegó vestido de vaquero para pagar una especie de apuesta y entre bromas dijo "soy texano" durante la rueda de prensa al final del partido.

Los Mavs sumaron tres triunfos seguidos para una marca de 18-16, mientras que Lakers se quedó con 13 y 20 reveses, sumando el cuarto desatino en fila.

Doncic el lunes fue nombrado el Jugador de la Semana de la conferencia del Oeste después de liderar a Dallas, 3-1, en ese lapso, con una salida monumental ante Houston el 23 de diciembre, en la que anotó 50 puntos contra los Rockets antes del regreso a casa para el gran día de Navidad que le tenía reservado a los fanáticos del área de Dallas y Fort Worth.