Dra. Polo: "El objetivo es enviar un mensaje positivo en este mundo tan complicado"

DALLAS -- Aunque su nuevo libro contiene cartas muy subidas de tono, Ana María Polo, la popular conductora del programa televisivo “Caso Cerrado”, cree que si las personas prestan atención, logran extraer el material fundamental de éste.

"El objetivo es mandar un mensaje positivo en este mundo tan complicado. Estas cartas no son para niños pequeños", aclara la doctora, en una entrevista telefónica desde Miami con Hoy Dallas, para conversar sobre el lanzamiento de "Querida Dra. Polo 2. Las cartas secretas de Caso Cerrado".

"Este libro contiene cartas que no se publicaron en el primero y que yo las contesto en una forma directa y honesta. Y al final incluye un apartado con una lista de recursos legales e información para el público", explica.

Ana María Polo lleva ya 13 años al frente de Caso Cerrado, un programa que se transmite por la cadena Telemundo desde Miami a varios países.

"Caso Cerrado ha ido cambiando con los tiempos. En su formato original, es una sala de resolución de conflictos, que pueden ser médicos o sicológicos, no es una sala de corte exclusivamente como muchos piensan".

La Dra. considera que además de presentar los casos en una forma entretenida, "lo que pretendo explicarle al público es que los conflictos son parte de la vida, pero que podemos disolverlos para ir al siguiente".

"Es importante aprender a negociar", enfatiza. "Entender que no todo es blanco y negro para poder solucionar el nudo que se forma con los conflictos que a veces enfrentamos".

El programa, que muchos consideran exagerado, en opinión de su conductora "refleja el drama humano, los problemas que tenemos hoy en día”.

Y hay un público masivo que la sigue.

"Es algo extraordinario. Acabo de ir a California, estuve en una feria de salud y 1 de cada 2 personas me daba una carta. Me siento honrada y privilegiada de poder darles aliento y de que me confíen cosas tan íntimas y tan dolorosas".

A diario, entre 800 y 1000 mensajes electrónicos llegan al buzón de la Dra. Polo. De las cartas escritas a mano, dice, no podría calcular todas las que ha recibido a lo largo de 13 años al frente de Caso Cerrado.

"Los niños tienen a veces acceso a cosas más subidas de tono en el Internet y sus padres no saben, así que prefiero que vean los casos en la tele, porque aquí las ponemos en contexto. Y al final siempre hay una moraleja", insiste.

También cree que los problemas que se exponen en Caso Cerrado no son exclusivos de los latinos, "creo que son conflictos universales que comparte el ser humano, como la infidelidad o la falta de comunicación".

Otro asunto cargado de drama es el de los indocumentados en Estados Unidos, un tema que la Dra. aborda con pasión al mencionársele.

"Promesas, promesas, promesas, es una desverguenza para la administración", afirma sobre la falta de una reforma migratoria. "Es un problema que va creciendo (se estima que hay más de 11 millones de indocumentados viviendo en las sombras en todo E.U.) y necesitamos atenderlo, y hay gente sin documentos de todas partes del mundo aquí miles de chilenos, italianos, frances y europeos".

A la gente que carece de estatus legal les recomienda "que se porten bien. Porque a los que no se porten bien no van a poner beneficiarse cuando aprueben una reforma".

"Que no vivan escondidas, que busquen información. No tienen que vivir de esa manera. Una mujer indocumentada que sufre de violencia doméstica y que no lo reporta sufre un doble daño, porque no se protege de su agresor y deja -posiblemente- de recibir el beneficio de una visa que la podría ayudar a conseguir un estatus legal.

“No podemos vivir a obscuras, edúquese, infórmese”, pide.

ACOMPAÑADA. Hace 11 años, Ana María Polo padeció y superó un cáncer de mama. Fue un asunto que decidió compartir con el público, algo que al parecer la acercó más a los televidentes.

"El tema lo compartí desde el primer día en que me diagnosticaron, parte de mi trabajo es ser ejemplo de información, conocimiento. Mis miedos los comparto, es un cáncer (de seno) que se puede ganar, no podemos esconder la cabeza como el avestruz, hay que enfrentarlo y escoger el mejor método para uno".

“Fue de gran recompensa y me he sentido muy acompañada por el público desde entonces”, concluyó.

"El objetivo es mandar un mensaje positivo en este mundo tan complicado. Estas cartas no son para niños pequeños", aclara la doctora, en una entrevista telefónica desde Miami con Hoy Dallas, para conversar sobre el lanzamiento de "Querida Dra. Polo 2. Las cartas secretas de Caso Cerrado".

"Este libro contiene cartas que no se publicaron en el primero y que yo las contesto en una forma directa y honesta. Y al final incluye un apartado con una lista de recursos legales e información para el público", explica.

Ana María Polo lleva ya 13 años al frente de Caso Cerrado, un programa que se transmite por la cadena Telemundo desde Miami a varios países.

"Caso Cerrado ha ido cambiando con los tiempos. En su formato original, es una sala de resolución de conflictos, que pueden ser médicos o sicológicos, no es una sala de corte exclusivamente como muchos piensan".

La Dra. considera que además de presentar los casos en una forma entretenida, "lo que pretendo explicarle al público es que los conflictos son parte de la vida, pero que podemos disolverlos para ir al siguiente".

"Es importante aprender a negociar", enfatiza. "Entender que no todo es blanco y negro para poder solucionar el nudo que se forma con los conflictos que a veces enfrentamos".

El programa, que muchos consideran exagerado, en opinión de su conductora "refleja el drama humano, los problemas que tenemos hoy en día”.

Y hay un público masivo que la sigue.

"Es algo extraordinario. Acabo de ir a California, estuve en una feria de salud y 1 de cada 2 personas me daba una carta. Me siento honrada y privilegiada de poder darles aliento y de que me confíen cosas tan íntimas y tan dolorosas".

A diario, entre 800 y 1000 mensajes electrónicos llegan al buzón de la Dra. Polo. De las cartas escritas a mano, dice, no podría calcular todas las que ha recibido a lo largo de 13 años al frente de Caso Cerrado.

"Los niños tienen a veces acceso a cosas más subidas de tono en el Internet y sus padres no saben, así que prefiero que vean los casos en la tele, porque aquí las ponemos en contexto. Y al final siempre hay una moraleja", insiste.

También cree que los problemas que se exponen en Caso Cerrado no son exclusivos de los latinos, "creo que son conflictos universales que comparte el ser humano, como la infidelidad o la falta de comunicación".

Otro asunto cargado de drama es el de los indocumentados en Estados Unidos, un tema que la Dra. aborda con pasión al mencionársele.

"Promesas, promesas, promesas, es una desverguenza para la administración", afirma sobre la falta de una reforma migratoria. "Es un problema que va creciendo (se estima que hay más de 11 millones de indocumentados viviendo en las sombras en todo E.U.) y necesitamos atenderlo, y hay gente sin documentos de todas partes del mundo aquí miles de chilenos, italianos, frances y europeos".

A la gente que carece de estatus legal les recomienda "que se porten bien. Porque a los que no se porten bien no van a poner beneficiarse cuando aprueben una reforma".

"Que no vivan escondidas, que busquen información. No tienen que vivir de esa manera. Una mujer indocumentada que sufre de violencia doméstica y que no lo reporta sufre un doble daño, porque no se protege de su agresor y deja -posiblemente- de recibir el beneficio de una visa que la podría ayudar a conseguir un estatus legal.

“No podemos vivir a obscuras, edúquese, infórmese”, pide.

ACOMPAÑADA. Hace 11 años, Ana María Polo padeció y superó un cáncer de mama. Fue un asunto que decidió compartir con el público, algo que al parecer la acercó más a los televidentes.

"El tema lo compartí desde el primer día en que me diagnosticaron, parte de mi trabajo es ser ejemplo de información, conocimiento. Mis miedos los comparto, es un cáncer (de seno) que se puede ganar, no podemos esconder la cabeza como el avestruz, hay que enfrentarlo y escoger el mejor método para uno".

“Fue de gran recompensa y me he sentido muy acompañada por el público desde entonces”, concluyó.