Opinión: Quienes promueven el odio antiinmigrante también tienen manchadas las manos
Las tragedias ocurridas en Allen y Brownsville, Texas, fueron perpetradas por dos hispanos: uno, cuyas creencias supremacistas lo llevaron a matar a ocho personas con un rifle de asalto en un centro comercial; y el segundo, con largo historial criminal, que embistió con su vehículo —no se determina aún si intencionalmente— a una multitud de migrantes frente a un albergue, matando a ocho e hiriendo a 10, casi todos venezolanos en busca de asilo. El fin del Título 42 este jueves 11 de mayo acrecienta temores de más actos de violencia en la frontera.