Las buenas maneras son indicio de buena o mala crianza entre los individuos. Está documentado que una persona con buenas maneras, es más aceptada en la sociedad que una que no sabe saludar, ni decir con permiso, ni muchas gracias, y lo peor que no muestre respeto a una dama en presencia de otras personas.
Tenemos a un presidente que carece de conocimientos básicos sobre reglas de urbanidad, por lo que es nuestra obligación, como ciudadanos conscientes de nuestro poderío e imagen en todo el mundo, darle a la mayor brevedad, las siguientes lecciones de modales a nuestro primer mandatario. Ante la imposibilidad de dárselas en persona, se las hacemos llegar por este medio.
1. Cuando una dama y más si se trata de Angela Merkel, la canciller de Alemania te pregunta: "¿Nos damos un apretón de manos frente a las cámaras?", tú te levantas como resorte y le dices: ¨Por supuesto, será un honor.¨ Lo que hiciste nos avergonzó a todos. Te hiciste como que no la escuchaste, te engarruñaste como una oruga perseguida y la ignoraste. Eso no se le hace a la representante de una de las naciones más poderosas de Europa.
2. Cuando alguien te llame por teléfono y no estás de acuerdo con esa persona, no le cuelgues el teléfono nomás porque te da la contraria o te recuerda que el acuerdo no es como lo estás manejando. Lo que le hiciste, durante los primeros días de tu gobierno, al Primer Ministro de Australia, Malcolm Turnbull, no estuvo bien. Primero le dicen que la charla iba a durar una hora y tú le cuelgas a los 25 minutos. Eso no lo debe hacer nadie, menos el presidente de Estados Unidos.
3. Los buenos modales y la buena urbanidad debe ser intachable también con los vecinos y con tus vecinos del Sur te has portado de lo peor. Desde antes de llegar a la Casa Blanca te has dedicado a hablar mal de ellos, les has lanzado las peores amenazas para su integridad, su economía y su buen vivir y ahora pretendes construir un muro que te va a costar casi 20 billones de dólares. ¿De dónde los vas a sacar? ¡Ah del presupuesto! Con recortes a la educación, a la salud, a las artes, al medio ambiente, ¿Te parece bien eso? Nadie debe permitirlo.
4. Por último, si no aprendes estas reglas básicas de urbanidad, la persona que te las va enseñar a su manera se llama Xi Jinping, ya te dio la primera lección. Se rehusó a hablar contigo, hasta que estuvo seguro que te ibas a comportar a la altura de tu posición.
5. ¡Ah! y por último, quítate esa costumbre de apretar de más la mano de los que te visitan y luego los jalas hacia ti. Eso se hace con los compañeros de primaria que te los encuentras después de 20 años, no con los mandatarios que te visitan en la Casa Blanca.Alicia Alarcón, periodista radial, conduce un programa de opinión en KBLA-1580 AM en Los Angeles, CA. Es autora de La Migra Me Hizo los Mandados y Revancha en Los Angeles (Arte Público Press). Su correo electrónico es: This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Tenemos a un presidente que carece de conocimientos básicos sobre reglas de urbanidad, por lo que es nuestra obligación, como ciudadanos conscientes de nuestro poderío e imagen en todo el mundo, darle a la mayor brevedad, las siguientes lecciones de modales a nuestro primer mandatario. Ante la imposibilidad de dárselas en persona, se las hacemos llegar por este medio.
1. Cuando una dama y más si se trata de Angela Merkel, la canciller de Alemania te pregunta: "¿Nos damos un apretón de manos frente a las cámaras?", tú te levantas como resorte y le dices: ¨Por supuesto, será un honor.¨ Lo que hiciste nos avergonzó a todos. Te hiciste como que no la escuchaste, te engarruñaste como una oruga perseguida y la ignoraste. Eso no se le hace a la representante de una de las naciones más poderosas de Europa.
2. Cuando alguien te llame por teléfono y no estás de acuerdo con esa persona, no le cuelgues el teléfono nomás porque te da la contraria o te recuerda que el acuerdo no es como lo estás manejando. Lo que le hiciste, durante los primeros días de tu gobierno, al Primer Ministro de Australia, Malcolm Turnbull, no estuvo bien. Primero le dicen que la charla iba a durar una hora y tú le cuelgas a los 25 minutos. Eso no lo debe hacer nadie, menos el presidente de Estados Unidos.
3. Los buenos modales y la buena urbanidad debe ser intachable también con los vecinos y con tus vecinos del Sur te has portado de lo peor. Desde antes de llegar a la Casa Blanca te has dedicado a hablar mal de ellos, les has lanzado las peores amenazas para su integridad, su economía y su buen vivir y ahora pretendes construir un muro que te va a costar casi 20 billones de dólares. ¿De dónde los vas a sacar? ¡Ah del presupuesto! Con recortes a la educación, a la salud, a las artes, al medio ambiente, ¿Te parece bien eso? Nadie debe permitirlo.
4. Por último, si no aprendes estas reglas básicas de urbanidad, la persona que te las va enseñar a su manera se llama Xi Jinping, ya te dio la primera lección. Se rehusó a hablar contigo, hasta que estuvo seguro que te ibas a comportar a la altura de tu posición.
5. ¡Ah! y por último, quítate esa costumbre de apretar de más la mano de los que te visitan y luego los jalas hacia ti. Eso se hace con los compañeros de primaria que te los encuentras después de 20 años, no con los mandatarios que te visitan en la Casa Blanca.
Alicia Alarcón, periodista radial, conduce un programa de opinión en KBLA-1580 AM en Los Angeles, CA. Es autora de La Migra Me Hizo los Mandados y Revancha en Los Angeles (Arte Público Press). Su correo electrónico es: This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.