Rosa María Hernández, la niña indocumentada de 10 años que sufre parálisis cerebral que estaba detenida en San Antonio quedó en liberada para regresar con sus famiiares el viernes, confirmaron abogados de la ACLU (Union Americana de Libertades Civiles).
BREAKING: Rosa Maria is finally free. We are thrilled that she can now recover, surrounded by her family’s love and support.
— ACLU (@ACLU) November 3, 2017La ACLU presentó una demanda contra el gobierno federal por la detención de la niña, alegando que "no debió de ser detenida ni por un segundo" y que sus derechos constitucionales estaban siendo violados.
"Ella fue arrancada de su familia por el gobierno federal sin autorización. Continuaremos retando al gobierno para que detenga este tipo de conducta desalmada e ilegal", declaró Andre Segura, director legal de la ACLU de Texas.Rosa María, se dirigía a una cirugía de vesícula proveniente de Laredo, Texas, hacia Corpus Christi, cuando fue detenida en un puesto de control de inmigración. Agentes de la Patrulla Fronteriza la siguieron hasta el hospital y se apostaron afuera de su habitación hasta que fue dada de alta. Después la mantuvieron bajo custodia federal inmediatamene después de la operación, cuando aún se estaba recuperando en su cama de hospital, y la encarcelaron a 150 millas de ahí en un centro infantil, lejos de sus padres.
"No tenían una orden. Rosa María nunca había sido separada de sus padres, y su condición médica requiere atención constante. Ha vivido al cuidado de sus padres en los Estados Unidos desde que tenía 3 meses de edad", indicó ACLU en un comunicado el viernes, explicando el caso de la menor.
TRAUMA
"Rosa ha sido liberada finalmente. Esta niña y sus seres queridos han pasado por algo traumático. Les deseo lo mejor y espero que la salud de Rosa María mejore", dijo el congresista de San Antonio, Joaquín Castro después de conocer la situación de la menor, nacida en México.Aunque celebró la noticia, "el futuro de Rosa María es incierto", señaló Castro. "La administración Trump no da dejado en claro si procedarán con la deportación en su contra. Yo sigo pidiendo que el caso de Rosa María sea cerrado administrativamente", afirmó el legislador.
Castro también instó al Departamento de Seguridad Nacional a que cumpla con lo que ha proclamado acerca de que sus prioridades son los delincuentes peligrosos. "Un caso como el de Rosa Maria nunca debería volver a suceder ", declaró. "Estados Unidos no debe ser un lugar en el que los niños que buscan atención médica para sobrevivir corran el riesgo de ser aprehendidos”, agregó.
BREAKING: Rosa Maria is finally free. We are thrilled that she can now recover, surrounded by her family’s love and support.
— ACLU (@ACLU) November 3, 2017
La ACLU presentó una demanda contra el gobierno federal por la detención de la niña, alegando que "no debió de ser detenida ni por un segundo" y que sus derechos constitucionales estaban siendo violados.
"Ella fue arrancada de su familia por el gobierno federal sin autorización. Continuaremos retando al gobierno para que detenga este tipo de conducta desalmada e ilegal", declaró Andre Segura, director legal de la ACLU de Texas.
Rosa María, se dirigía a una cirugía de vesícula proveniente de Laredo, Texas, hacia Corpus Christi, cuando fue detenida en un puesto de control de inmigración. Agentes de la Patrulla Fronteriza la siguieron hasta el hospital y se apostaron afuera de su habitación hasta que fue dada de alta. Después la mantuvieron bajo custodia federal inmediatamene después de la operación, cuando aún se estaba recuperando en su cama de hospital, y la encarcelaron a 150 millas de ahí en un centro infantil, lejos de sus padres.
"No tenían una orden. Rosa María nunca había sido separada de sus padres, y su condición médica requiere atención constante. Ha vivido al cuidado de sus padres en los Estados Unidos desde que tenía 3 meses de edad", indicó ACLU en un comunicado el viernes, explicando el caso de la menor.
TRAUMA
"Rosa ha sido liberada finalmente. Esta niña y sus seres queridos han pasado por algo traumático. Les deseo lo mejor y espero que la salud de Rosa María mejore", dijo el congresista de San Antonio, Joaquín Castro después de conocer la situación de la menor, nacida en México.
Aunque celebró la noticia, "el futuro de Rosa María es incierto", señaló Castro. "La administración Trump no da dejado en claro si procedarán con la deportación en su contra. Yo sigo pidiendo que el caso de Rosa María sea cerrado administrativamente", afirmó el legislador.
Castro también instó al Departamento de Seguridad Nacional a que cumpla con lo que ha proclamado acerca de que sus prioridades son los delincuentes peligrosos. "Un caso como el de Rosa Maria nunca debería volver a suceder ", declaró. "Estados Unidos no debe ser un lugar en el que los niños que buscan atención médica para sobrevivir corran el riesgo de ser aprehendidos”, agregó.