Propuestas anti-inmigrantes en Texas "reflejan una percepción equivocada"

DALLAS -- Las propuestas anti-inmigrantes que están en la agenda de la 84ava Legislatura de Texas reflejan una percepción equivocada de que los migrantes representan un costo para la sociedad estadounidense, estimó el doctor Jorge Santibañez, experto en temas de inmigración y ex director del Colegio de la Frontera Norte.

Al concluir su participación en una conferencia sobre las relaciones México-Texas en el Consulado de México el jueves por la noche, Santibañez dijo que "hay muchísimos datos -proporcionados por el mismo gobierno de Estados Unidos, que demuestran que los migrantes representan un beneficio", contrario a lo que algunos políticos quieren hacer creer.

"Lo que pasa es que no hemo sido capaces, los académicos, la sociedad civil organizada, de enfrentar correctamente el discurso con intereses estrictamente ideológicos y políticos que ven al migrante como un costo", añadió el estudioso.

En 2013, los Latinos en Texas pagaron $23.6 mil millones en impuestos federales y $11.4 mil millones en impuestos estatales/locales, según cifras del grupo "Partnership for a New American Economy". En particular, latinos nacidos en el extranjero pagaron $8.4 mil millones en impuestos federales y $4.6 mil millones en impuestos estatales/locales.

El Texas Dream Act, promulgado en 2001 (HB 1403) le permite a estudiantes que no nacieron en Estados Unidos ni son residentes legales inscribirse en la universidad o instituciones de educación superior y pagar la misma cuota como si fueran residentes del Estado. Sin embargo, la actual Legislatura texana tiene en su agenda una propuesta (SB 1819) que busca repeler dicha ley y quitarle esos derechos a los estudiantes indocumentados.

Los inmigrantes no-autorizados en Texas pagaron $1.6 mil millones en impuestos locales y estatales en 2010, incluyendo $1.4 mil millones en impuestos de ventas y $204.4 millones en impuestos a la propiedad, de acuerdo al Institute for Taxation and Economic Policy.

"Por desgracia, veo que hay una posición que todavía ve al mexicano como a un costo. Esa es una realidad, lo que pasa con las propuestas anti-inmigrantes es el reflejo de esa mal vista realidad", señala Santibañez.

El 37 por ciento de la población de Texas tiene raíces mexicanas, unos nacieron en Estados Unidos y otros en México.

"En Texas hay alrededor de 26.4 millones de habitantes; de esos, 9.6 son mexicanos", dijo Santibañez. "Y de ese total, 7.5 millones nacieron en Texas, más que en ningún otro estado", afirma el experto.

La Legislatura también contempla la antepropuesta SB 185, que le daría facultades a la policía para preguntarle a residentes su estatus legal.

De acuerdo a un reporte del grupo Perryman Group, si todos los inmigrantes indocumentados fueran expulsados de Texas, el estado perdería 63.3 mil millones de actividad económica, $30.8 mil millones en producto interno estatal y aproximdamente 403,174 empleos, incluso tomando en cuenta el tiempo de ajuste adecuado del mercado.

Ante estas propuestas, Santibañez propone que los mexicanos -con documentos o sin ellos- se integren de la mejor manera a Estados Unidos sin desvincularse de México.

"El que pueda ser ciudadano que se haga ciudadano, el que pueda votar que vote, el que pueda participar en sociedad que lo haga, el que pueda aprovechar oportunidades, que las aproveche. Por mucho tiempo queríamos que siguieran pensando en México, lo pueden hacer, pero eso ya no se opone a que piensen en desarrollarse aquí". 

 

Al concluir su participación en una conferencia sobre las relaciones México-Texas en el Consulado de México el jueves por la noche, Santibañez dijo que "hay muchísimos datos -proporcionados por el mismo gobierno de Estados Unidos, que demuestran que los migrantes representan un beneficio", contrario a lo que algunos políticos quieren hacer creer.

"Lo que pasa es que no hemo sido capaces, los académicos, la sociedad civil organizada, de enfrentar correctamente el discurso con intereses estrictamente ideológicos y políticos que ven al migrante como un costo", añadió el estudioso.

En 2013, los Latinos en Texas pagaron $23.6 mil millones en impuestos federales y $11.4 mil millones en impuestos estatales/locales, según cifras del grupo "Partnership for a New American Economy". En particular, latinos nacidos en el extranjero pagaron $8.4 mil millones en impuestos federales y $4.6 mil millones en impuestos estatales/locales.

El Texas Dream Act, promulgado en 2001 (HB 1403) le permite a estudiantes que no nacieron en Estados Unidos ni son residentes legales inscribirse en la universidad o instituciones de educación superior y pagar la misma cuota como si fueran residentes del Estado. Sin embargo, la actual Legislatura texana tiene en su agenda una propuesta (SB 1819) que busca repeler dicha ley y quitarle esos derechos a los estudiantes indocumentados.

Los inmigrantes no-autorizados en Texas pagaron $1.6 mil millones en impuestos locales y estatales en 2010, incluyendo $1.4 mil millones en impuestos de ventas y $204.4 millones en impuestos a la propiedad, de acuerdo al Institute for Taxation and Economic Policy.

"Por desgracia, veo que hay una posición que todavía ve al mexicano como a un costo. Esa es una realidad, lo que pasa con las propuestas anti-inmigrantes es el reflejo de esa mal vista realidad", señala Santibañez.

El 37 por ciento de la población de Texas tiene raíces mexicanas, unos nacieron en Estados Unidos y otros en México.

"En Texas hay alrededor de 26.4 millones de habitantes; de esos, 9.6 son mexicanos", dijo Santibañez. "Y de ese total, 7.5 millones nacieron en Texas, más que en ningún otro estado", afirma el experto.

La Legislatura también contempla la antepropuesta SB 185, que le daría facultades a la policía para preguntarle a residentes su estatus legal.

De acuerdo a un reporte del grupo Perryman Group, si todos los inmigrantes indocumentados fueran expulsados de Texas, el estado perdería 63.3 mil millones de actividad económica, $30.8 mil millones en producto interno estatal y aproximdamente 403,174 empleos, incluso tomando en cuenta el tiempo de ajuste adecuado del mercado.

Ante estas propuestas, Santibañez propone que los mexicanos -con documentos o sin ellos- se integren de la mejor manera a Estados Unidos sin desvincularse de México.

"El que pueda ser ciudadano que se haga ciudadano, el que pueda votar que vote, el que pueda participar en sociedad que lo haga, el que pueda aprovechar oportunidades, que las aproveche. Por mucho tiempo queríamos que siguieran pensando en México, lo pueden hacer, pero eso ya no se opone a que piensen en desarrollarse aquí".