Conductor del tráiler donde murieron indocumentados se declaró culpable

James Bradley Jr. se declaró culpable de una operación de contrabandando de extranjeros, la cual resultó en la muerte de 10 indocumentados en la caja de su tráiler a finales de julio en San Antonio, Texas.

Bradley Jr., de 61 años, se presentó en una corte federal el lunes 16 de octubre, y al declararse culpable de los cargos que enfrentaba, (conspiración para transportar a inmigrantes resultando en muerte y otro por transportar a inmigrantes con resultado mortal) evitó una posible pena de muerte, y ahora enfrenta una sentencia de cadena perpetua en enero próximo.

El conductor admitió que el 23 de julio de 2017, conspiró para transportar extranjeros indocumentados a los Estados Unidos para obtener ganancias económicas.

El caso fue noticia a nivel internacional, al conocerse la forma en que el vehículo que Bradley conducía fue descubierto, y las condiciones en las que sus ocupantes (39) fueron hallados.

Varios de ellos fueron rescatados y al recuperar la conciencia, narraron cómo estuvieron al borde de la asfixia en la parte trasera de un camión que los transportó desde la frontera hasta San Antonio, sin aire acondicionado. Uno de ellos dijo que tuvo que beber líquido anticongelante para sobrevivir.

De acuerdo al San Antonio Current, Pedro Silva Segura, de 47 años, un presunto indocumentado de Laredo,  quien está acusado como co-conspirador en el caso, aún no ha buscado un arreglo con la corte o ha recibido una audiencia para ser sentenciado.

Las autoridades federales de inmigración (ICE) ya deportaron a dos sobrevivientes del horrendo recorrido, después de indicar que ya no eran requeridos para actuar como testigos del crimen.

Mike McCrum, el abogado que representaba a los testigos, declaró al Current en septiembre, que sospechaba que ya no los necesitaban porque pudieron haber alcanzado un acuerdo con Bradley.

El consulado de México en San Antonio identificó a 34 de los 39 inmigrantes envueltos en la travesía como mexicanos. De los 10 que murieron, ocho eran de esa nacionalidad, indicaron las autoridades.  Los testimonios de los sobrevivientes indicaron que entre 70 y hasta 200 personas hicieron la travesía a bordo del tráiler.

Los dos repatriados en septiembre tenían en su expediente deportaciones previas.

Bradley Jr., de 61 años, se presentó en una corte federal el lunes 16 de octubre, y al declararse culpable de los cargos que enfrentaba, (conspiración para transportar a inmigrantes resultando en muerte y otro por transportar a inmigrantes con resultado mortal) evitó una posible pena de muerte, y ahora enfrenta una sentencia de cadena perpetua en enero próximo.

El conductor admitió que el 23 de julio de 2017, conspiró para transportar extranjeros indocumentados a los Estados Unidos para obtener ganancias económicas.

El caso fue noticia a nivel internacional, al conocerse la forma en que el vehículo que Bradley conducía fue descubierto, y las condiciones en las que sus ocupantes (39) fueron hallados.

Varios de ellos fueron rescatados y al recuperar la conciencia, narraron cómo estuvieron al borde de la asfixia en la parte trasera de un camión que los transportó desde la frontera hasta San Antonio, sin aire acondicionado. Uno de ellos dijo que tuvo que beber líquido anticongelante para sobrevivir.

De acuerdo al San Antonio Current, Pedro Silva Segura, de 47 años, un presunto indocumentado de Laredo,  quien está acusado como co-conspirador en el caso, aún no ha buscado un arreglo con la corte o ha recibido una audiencia para ser sentenciado.

Las autoridades federales de inmigración (ICE) ya deportaron a dos sobrevivientes del horrendo recorrido, después de indicar que ya no eran requeridos para actuar como testigos del crimen.

Mike McCrum, el abogado que representaba a los testigos, declaró al Current en septiembre, que sospechaba que ya no los necesitaban porque pudieron haber alcanzado un acuerdo con Bradley.

El consulado de México en San Antonio identificó a 34 de los 39 inmigrantes envueltos en la travesía como mexicanos. De los 10 que murieron, ocho eran de esa nacionalidad, indicaron las autoridades.  Los testimonios de los sobrevivientes indicaron que entre 70 y hasta 200 personas hicieron la travesía a bordo del tráiler.

Los dos repatriados en septiembre tenían en su expediente deportaciones previas.