Causa furor Canelo Alvarez entre fans de Dallas/Fort Worth

GRAPEVINE -- Dos amigas esperaron varias horas para poder ver de cerca a Saúl Canelo Alvarez el miércoles, el día en que subió al ring, habló con los medios y atendió a sus fanáticos en la medida de lo posible.

Rosa García lo entendió muy bien. Se sentía un poco adolorida de la rodilla por la larga espera y aunque no pudo obtener un autógrafo de Canelo, sí alcanzó a tomarle fotos. García llegó desde las 10 a.m. al centro de convenciones del Garylord Texan en Grapevine, mientras que su amiga Mónica González, llegó un poco más temprano, a las 9:30. Las dos se acercaron al lugar desde Oak Cliff.

La cita era a las 2 p.m. Los mariachis también llegaron temprano para animar al público. Otras mamás llegaron con sus hijos, pero en realidad iban solo a acompañar a sus esposos, dijeron.

Canelo, serio pero cortés, atendió a varias preguntas de la prensa, pero en concreto comunicó que se sentía confiado en su preparación. "Emocionado también", dijo. 

Arriba del ring, con ropa deportiva y tenis, aunque no hizo calentamiento en forma, posó para los fotógrafos. Oscar de la Hoya, el presidente de Golden Boy Promotions, se le unió frente a las cientos de lentes que de inmediato los enfocaron, para capturar el momento.

En uno de sus intercambios con los reporteros, el boxeador mexicano reiteró el agradecimiento que siente hacia su afición texana.

Al Gaylord Texan sus fieles seguidores llegaron por varios cientos a intentar saludarlo o incluso tomarse una foto. Y varios de ellos alegremente lograron cumplir su objetivo.

La pelea de Alvarez contra Liam Smith está programada para el sábado 17 en el AT&T Stadium, y es considerada por muchos como parte de los festejos de las fiestas patrias de los mexicanos en Estados Unidos.

Rosa García lo entendió muy bien. Se sentía un poco adolorida de la rodilla por la larga espera y aunque no pudo obtener un autógrafo de Canelo, sí alcanzó a tomarle fotos. García llegó desde las 10 a.m. al centro de convenciones del Garylord Texan en Grapevine, mientras que su amiga Mónica González, llegó un poco más temprano, a las 9:30. Las dos se acercaron al lugar desde Oak Cliff.

La cita era a las 2 p.m. Los mariachis también llegaron temprano para animar al público. Otras mamás llegaron con sus hijos, pero en realidad iban solo a acompañar a sus esposos, dijeron.

Canelo, serio pero cortés, atendió a varias preguntas de la prensa, pero en concreto comunicó que se sentía confiado en su preparación. "Emocionado también", dijo. 

Arriba del ring, con ropa deportiva y tenis, aunque no hizo calentamiento en forma, posó para los fotógrafos. Oscar de la Hoya, el presidente de Golden Boy Promotions, se le unió frente a las cientos de lentes que de inmediato los enfocaron, para capturar el momento.

En uno de sus intercambios con los reporteros, el boxeador mexicano reiteró el agradecimiento que siente hacia su afición texana.

Al Gaylord Texan sus fieles seguidores llegaron por varios cientos a intentar saludarlo o incluso tomarse una foto. Y varios de ellos alegremente lograron cumplir su objetivo.

La pelea de Alvarez contra Liam Smith está programada para el sábado 17 en el AT&T Stadium, y es considerada por muchos como parte de los festejos de las fiestas patrias de los mexicanos en Estados Unidos.