En Dallas, miles hacen eco de la Marcha de Mujeres en Washington

 DALLAS -- A Sharon Stewart no le importó levantarse temprano y conducir desde Natchitoches, Luisiana, hasta Dallas, para unirse a la marcha de mujeres que pobló las calles del centro de la ciudad el sábado.

Al saber que su hija saldría a expresarse en Syracuse, su sobrina en Washington, otra más en Miami, y algunos amigos en Nueva York y Boston, a Stewart le quedó claro que se tendría que unir, gustosamente, a la marcha más cercana a su área.

“Simplemente disfruté ser parte de esta marcha. Me hizo recordar cuando participé en una protesta contra la Guerra de Vietnam en Washington y fui a tocar puertas cuando era adolescente para que la gente votara contra la guerra”, dijo con cierta nostalgia al final del evento, mientras caminaba hacia su automóvil.

“Veo una ola de activismo que está creciendo”, señaló, antes de apuntar que los organizadores en Dallas, se vieron rebasados en sus expectativas y no pudieron evitar que gran parte del público se dispersara al final de la marcha: Esperaban a unos tres mil, y el cálculo generalizado fue de nueve mil asistentes.

 FELIZ DE QUE LA TRAJERAN
A Elba Dávila, una venezolana que hace cinco años vive en el país, le preocupaba un poco participar en la demostración, pero como pudo ver, todo transcurrió en paz.

Paola Zurita empujó la silla de ruedas de su compatriota, de 80 años de edad, durante el recorrido de más de dos millas que hicieron, y la caraqueña no pudo más que expresar regocijo al final de la marcha.

“Feliz, aquí estoy gozando mucho, de verdad que la gente es solidaria”, fueron las palabras de Dávila cuando estaba a punto de finalizar el recorrido, sobre la Avenida Washington. Acerca de su nuevo país de residencia, comentó que le sienta bien. “Me gusta su tranquilidad, me gusta su democracia, por lo menos hasta ahora”, señaló, alegre.

NI UNA MENOS
Juana Veliz, quien atraía la atención fácilmente con una pancarta que leía “Ni una menos”, opinó que haber ido al evento era algo imperativo. "Para mí no hay otra cosa, esto es lo que demos estar haciendo todos [marchando]. Cuando alguien tiene derechos, no se debe de olvidar de otros que no tienen los mismos derechos”.

Veliz, una empresaria y confundadora de Impact AO, reflexionó sobre la jornada de demostraciones que vivió el país en centenares de ciudades un día después de la inauguración del gobierno de Donald Trump, a quien rechazaron de manera contundente a través de cánticos y mensajes gráficos en cada evento.

“Hoy todos tienen la oportunidad de usar sus voces, -para decir qué es lo que no nos gusta. Ya sabemos qué son algunos de los planes [de Trump], no sabemos todo totalmente, pero tenemos la oportunidad de expresar nuestra opinión sobre las cosas que están pendientes y que queremos cambiar".

 “No se nos debe olvidar qué tan fuerte somos como mujeres, como personas, como hispanas, que todo cuenta y podemos cambiar cosas aunque sea de a poco”.

Veliz recordó la preocupación de muchos ante la posibilidad de que el ACA (Affordable Care Act u "Obamacare", sea eliminado), y explicó que el evento servía para solidarse con la situación de las mujeres en el resto del continente.

"Tenemos que hablar sobre derechos de mujeres en todo el mundo, [de] nuestras hermanas de Latinoamericana, la violencia que les está pasando".

DÍA HISTÓRICO
Victoria Neave, la representante estatal del Dist. 107 de Dallas, también destacó el rasgo internacional que tuvo la marcha, que se originó en DC y terminó propagada más allá de las fronteras.

Este día es histórico. Hay marchas por todo el mundo en favor de mujeres. Y aquí en Dallas estamos enseñando también que somos parte de una conversación internacional”, dijo la recién electa legisladora, encargada de promover la marcha a nivel local.

Neave, quien estuvo acompañada por funcionarios locales y del condado al final de la marcha, complementó el evento organizando un banco de llamadas, dijo, "para traducir nuestra energía a acción. Vamos a llamar a mujeres registradas para votar, para hablar con ellas y escuchar qué temas son importantes para ellas en esta Legislatura, especialmente”.

En general, se estimó que más de 673 marchas hermanadas (junto a la de Washington) se registraron por todo el país. La cantidad de asistenes pudo haber sobrepado los 2.5 millones, según cálculos, superando, en tal caso, 5 a 1, la cantidad de personas que asistieron a la inauguración presidencial del viernes 20 en la capital estadounidense.

En una de sus publicaciones en Twitter, Joan Vennochi, columnista del Boston Globe, resumió sin equivocarse, lo que ocurrió el sábado. President Trump, for once a uniter - of women against him #MarchOnWashington

Al saber que su hija saldría a expresarse en Syracuse, su sobrina en Washington, otra más en Miami, y algunos amigos en Nueva York y Boston, a Stewart le quedó claro que se tendría que unir, gustosamente, a la marcha más cercana a su área.

“Simplemente disfruté ser parte de esta marcha. Me hizo recordar cuando participé en una protesta contra la Guerra de Vietnam en Washington y fui a tocar puertas cuando era adolescente para que la gente votara contra la guerra”, dijo con cierta nostalgia al final del evento, mientras caminaba hacia su automóvil.

“Veo una ola de activismo que está creciendo”, señaló, antes de apuntar que los organizadores en Dallas, se vieron rebasados en sus expectativas y no pudieron evitar que gran parte del público se dispersara al final de la marcha: Esperaban a unos tres mil, y el cálculo generalizado fue de nueve mil asistentes.

 FELIZ DE QUE LA TRAJERAN
A Elba Dávila, una venezolana que hace cinco años vive en el país, le preocupaba un poco participar en la demostración, pero como pudo ver, todo transcurrió en paz.

Paola Zurita empujó la silla de ruedas de su compatriota, de 80 años de edad, durante el recorrido de más de dos millas que hicieron, y la caraqueña no pudo más que expresar regocijo al final de la marcha.

“Feliz, aquí estoy gozando mucho, de verdad que la gente es solidaria”, fueron las palabras de Dávila cuando estaba a punto de finalizar el recorrido, sobre la Avenida Washington. Acerca de su nuevo país de residencia, comentó que le sienta bien. “Me gusta su tranquilidad, me gusta su democracia, por lo menos hasta ahora”, señaló, alegre.

NI UNA MENOS
Juana Veliz, quien atraía la atención fácilmente con una pancarta que leía “Ni una menos”, opinó que haber ido al evento era algo imperativo. "Para mí no hay otra cosa, esto es lo que demos estar haciendo todos [marchando]. Cuando alguien tiene derechos, no se debe de olvidar de otros que no tienen los mismos derechos”.

Veliz, una empresaria y confundadora de Impact AO, reflexionó sobre la jornada de demostraciones que vivió el país en centenares de ciudades un día después de la inauguración del gobierno de Donald Trump, a quien rechazaron de manera contundente a través de cánticos y mensajes gráficos en cada evento.

“Hoy todos tienen la oportunidad de usar sus voces, -para decir qué es lo que no nos gusta. Ya sabemos qué son algunos de los planes [de Trump], no sabemos todo totalmente, pero tenemos la oportunidad de expresar nuestra opinión sobre las cosas que están pendientes y que queremos cambiar".

 “No se nos debe olvidar qué tan fuerte somos como mujeres, como personas, como hispanas, que todo cuenta y podemos cambiar cosas aunque sea de a poco”.

Veliz recordó la preocupación de muchos ante la posibilidad de que el ACA (Affordable Care Act u "Obamacare", sea eliminado), y explicó que el evento servía para solidarse con la situación de las mujeres en el resto del continente.

"Tenemos que hablar sobre derechos de mujeres en todo el mundo, [de] nuestras hermanas de Latinoamericana, la violencia que les está pasando".

DÍA HISTÓRICO
Victoria Neave, la representante estatal del Dist. 107 de Dallas, también destacó el rasgo internacional que tuvo la marcha, que se originó en DC y terminó propagada más allá de las fronteras.

Este día es histórico. Hay marchas por todo el mundo en favor de mujeres. Y aquí en Dallas estamos enseñando también que somos parte de una conversación internacional”, dijo la recién electa legisladora, encargada de promover la marcha a nivel local.

Neave, quien estuvo acompañada por funcionarios locales y del condado al final de la marcha, complementó el evento organizando un banco de llamadas, dijo, "para traducir nuestra energía a acción. Vamos a llamar a mujeres registradas para votar, para hablar con ellas y escuchar qué temas son importantes para ellas en esta Legislatura, especialmente”.

En general, se estimó que más de 673 marchas hermanadas (junto a la de Washington) se registraron por todo el país. La cantidad de asistenes pudo haber sobrepado los 2.5 millones, según cálculos, superando, en tal caso, 5 a 1, la cantidad de personas que asistieron a la inauguración presidencial del viernes 20 en la capital estadounidense.

En una de sus publicaciones en Twitter, Joan Vennochi, columnista del Boston Globe, resumió sin equivocarse, lo que ocurrió el sábado. President Trump, for once a uniter - of women against him #MarchOnWashington