Warning: getimagesize(https://www.hoydallas.com/images/locales/Dade-330.jpg): failed to open stream: HTTP request failed! HTTP/1.1 404 Not Found in /home/customer/www/hoydallas.com/public_html/libraries/sourcecoast/openGraph.php on line 420
Alumnos de primaria aprenden a entender y manejar sus emociones

Alumnos de primaria aprenden a entender y manejar sus emociones

DALLAS -- Los niños que van a la escuela Dan D. Rogers han iniciado el año escolar aprendiendo a tomarse las cosas con calma, a respirar profundo y a relajarse, para estar mejor preparados para aprender.

En la Rogers Elementary toman clases niños de nivel pre-kinder a quinto año de primaria, algunos bilingues, con una población de 530 alumnos.

Todos los niños, de kinder o cuarto año, han aprendido a responder al sonido prolongado que emite una barra de metal una vez que es golpeada, como se hace una repiquetear a una campana. Al oir el sonido tan peculiar, los niños saben que es una señal para que hagan una pausa por completo, tomen un respiro profundo, estén presentes en el momento, concentrados en lo que hacen y una vez que se apaga el sonido regresen a lo que estaban haciendo. 

"Hacen algo que llamamos 'pretzel', nadie habla hasta que no se escucha el sonido y entonces todos regresan otra vez a trabajar", explica Jeanne Juneau, la consejera de la escuela acerca de las prácticas de respiración, que por lo regular son de 10 segundos.

"Es una manera de enseñarles a manejar sus emociones por sí mismos, como cuando están frustrados, irritados o no se pueden concentrar en su trabajo", añade Juneau. 

La lección es parte del plan de la escuela, titulado "Our Mind Time" (El tiempo de nuestra mente), que a su vez es parte del programa de aprendizaje socio-emocional (SEL, social emotional learning) del Dallas ISD, que cada vez gana más importancia a través del distrito.

"Los niños también pueden hacerlo en la casa, hay niños que nos han dicho, 'le dije a mi mamá del pretzel'. Le están contando a sus papás de esto. Y claro, esta solo es una estrategia del programa",  añade Juneau.

 La Dan D. Rogers es una escuela de aprendizaje personalizado del Dallas ISD y una de las pocas del distrito que ha implementado programas tan extensos como el que iniciaron este año en todo el campus. 

En la clase de prekínder de la maestra Martínez, sus alumnos ya entienden cómo es el cerebro el que se encarga de mandar una señal para que reaccionen cuando se van a caer de frente, es por eso que aprender a meter las manos, dice unos de los alumnos al preguntársele. 

Sé que ahora van a casa y le dicen a sus papás las partes del cerebro, 'esa esta parte para pensar con calma”, cuenta Juneau sobre el éxito temprano de las prácticas y enseñanzas que les han transmitido en este corto tiempo.

Los niños también, dependiendo del grado que cursen, son sentados de dos en dos y para practicar el diálo sobre algún tema. Aprenden a saludarse de mano, se presentan y dicen su nombre. "Porque hay niños que no saber saludar y presentarse por sí mismos y socializar", dice Juneau.

El programa empezó justo en el inicio de este año escolar y consta de 15 lecciones que fueron desarrolladas durante el verano para construirlo.

La consejera tenía programada una junta esta semana para hablar con los padres más acerca del programa.

En la Rogers Elementary toman clases niños de nivel pre-kinder a quinto año de primaria, algunos bilingues, con una población de 530 alumnos.

Todos los niños, de kinder o cuarto año, han aprendido a responder al sonido prolongado que emite una barra de metal una vez que es golpeada, como se hace una repiquetear a una campana. Al oir el sonido tan peculiar, los niños saben que es una señal para que hagan una pausa por completo, tomen un respiro profundo, estén presentes en el momento, concentrados en lo que hacen y una vez que se apaga el sonido regresen a lo que estaban haciendo. 

"Hacen algo que llamamos 'pretzel', nadie habla hasta que no se escucha el sonido y entonces todos regresan otra vez a trabajar", explica Jeanne Juneau, la consejera de la escuela acerca de las prácticas de respiración, que por lo regular son de 10 segundos.

"Es una manera de enseñarles a manejar sus emociones por sí mismos, como cuando están frustrados, irritados o no se pueden concentrar en su trabajo", añade Juneau. 

La lección es parte del plan de la escuela, titulado "Our Mind Time" (El tiempo de nuestra mente), que a su vez es parte del programa de aprendizaje socio-emocional (SEL, social emotional learning) del Dallas ISD, que cada vez gana más importancia a través del distrito.

"Los niños también pueden hacerlo en la casa, hay niños que nos han dicho, 'le dije a mi mamá del pretzel'. Le están contando a sus papás de esto. Y claro, esta solo es una estrategia del programa",  añade Juneau.

 La Dan D. Rogers es una escuela de aprendizaje personalizado del Dallas ISD y una de las pocas del distrito que ha implementado programas tan extensos como el que iniciaron este año en todo el campus. 

En la clase de prekínder de la maestra Martínez, sus alumnos ya entienden cómo es el cerebro el que se encarga de mandar una señal para que reaccionen cuando se van a caer de frente, es por eso que aprender a meter las manos, dice unos de los alumnos al preguntársele. 

Sé que ahora van a casa y le dicen a sus papás las partes del cerebro, 'esa esta parte para pensar con calma”, cuenta Juneau sobre el éxito temprano de las prácticas y enseñanzas que les han transmitido en este corto tiempo.

Los niños también, dependiendo del grado que cursen, son sentados de dos en dos y para practicar el diálo sobre algún tema. Aprenden a saludarse de mano, se presentan y dicen su nombre. "Porque hay niños que no saber saludar y presentarse por sí mismos y socializar", dice Juneau.

El programa empezó justo en el inicio de este año escolar y consta de 15 lecciones que fueron desarrolladas durante el verano para construirlo.

La consejera tenía programada una junta esta semana para hablar con los padres más acerca del programa.